Las instalaciones del Colegio Repiso tuvieron su último peritaje de obra en 2019, reveló el director técnico del Instituto Tamaulipeco de Infraestructura Física Educativa (ITIFE), Alejandro Robledo Ramírez.
Por lo que se debe realizar un peritaje para deslindar responsabilidades jurídicas y administrativas por el reciente desplome del domo que dejó a tres personas atrapadas entre los escombros.
“La última certificación que se registró, el último historial de esa escuela data del 2019 y debió certificarse nuevamente en el 2021. Ellos deben haberse comprometido o tramitar su certificación en ese entonces y no lo hicieron”, explicó.
Explicó que el Ayuntamiento de victoria tiene la responsabilidad de realizar y emitir un peritaje sobre las condiciones de la infraestructura del colegio, entre los que se encuentra el estado de las soldaduras de las estructuras, la resistencia del concreto, y por qué se desplomó la obra. Misma que se estima tiene más de 10 años.
Pero también Protección Civil debe realizar un diagnóstico, ya que no se puede realizar un señalamiento de las posibles causas del derrumbe si no se conoce a detalle el estado del inmueble.
Es preciso aclarar que el edificio que alberga al Colegio Antonio Repiso de Ciudad victoria tiene una antigüedad de al menos 100 años.