Camión doble remolque a máxima velocidad dejó una estela de destrucción y caos sobre la calle Héroe de Nacozari en la zona centro de Tampico.
La unidad pesada sin control se llevó varios autos de ruta dejándolos prácticamente pulverizados, pero eso no fue todo, también derribó un poste y varios puestos de productos navideños, así como de periódicos y revistas. En total se contabilizaron más de 20 autos destruidos.
En estos momentos ya se encuentra la fuerte movilización de las autoridades para atender a los heridos en este incidente sin precedentes.
Está es una de las zonas más concurridas al estar en la zona de mercados junto a la plaza Hijas de Tampico y el mercado turístico de la misma Ciudad.
Los enardecidos conductores que tenían sus unidades paradas en la rampa comenzaron a salir, junto con los propietarios de los negocios y también las casas que se vieron afectadas por el camión.
El responsable al ver la magnitud de los hechos, optó por correr y fue correteado por las personas que se encontraban en el lugar. Logrando atrincherarse en la vivienda de un conocido.
Poco a poco la gente comenzó a salir y a reunirse en el lugar de los hechos. Fueron cientos los que salieron y abarrotaron prácticamente toda la calle.
Al darse cuenta donde estaba el sujeto, estuvieron forzando las rejas y puertas para entrar por él. Intervino la Guardia Estatal para tranquilizar a la gente. Pero estuvieron esperando afuera para agarrarlo a golpes, de acuerdo a lo que todos estaban gritando.
Comenzaron a agarrar piedras y palos. Todo se salió de control cuando la policía formó un cerco para blindar al sujeto y sacarlo de la casa sin que lo lesionaran, ya que los vecinos estaban molestos y comenzó la confrontación contra los policías.
Destrozaron los cristales de por lo menos cuatro patrullas mientras ellos sacaban sano y salvo al chófer. Cuando lo lograron y se lo llevaron, los vecinos de la colonia Morelos arremetieron contra los efectivos.
En esta lucha los policías tuvieron que accionar sus armas de fuego hacia el aire para dispersar a los inconformes. Mientras esto sucedía se subieron a las patrullas y se fueron a toda velocidad.
Finalmente, todos los presentes comenzaron a correr hacia el camión y lo comenzaron a destrozar con sus propias manos para desquitarse de los daños que provocó.