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La deuda de Pemex con sus proveedores ha alcanzado un nivel histórico

El reporte financiero indica que la deuda de Pemex con sus proveedores aumentó un 27.5% el año pasado, alcanzando los 359,760 millones de pesos.

Durante el último trimestre del año pasado, Pemex registró ganancias sólidas impulsadas por una reducción en los impuestos y menores costos de ventas. Sin embargo, su deuda con proveedores aumentó un 27.5%, y su situación financiera también experimentó un ligero crecimiento medido en dólares.

Pemex, la mayor empresa del país, reportó una utilidad neta de 106,936 millones de pesos (mdp) frente a una pérdida de 95,502 mdp registrada en el mismo periodo de 2022. Por segundo año seguido cerró con ganancias.

A pesar de ello, los ingresos totales de Pemex disminuyeron un 17% interanual, alcanzando los 425,532 millones de pesos en el cuarto trimestre de 2023.

La deuda financiera significativa de Pemex aumentó a 106,100 millones de dólares (mdd) al cierre de 2023, en comparación con los 105,800 mdd reportados en el trimestre anterior.

El Gobierno ha destinado importantes sumas de dinero a Pemex con el fin de aliviar sus problemas financieros y permitir que la empresa pueda enfocarse en proyectos de exploración y extracción. El presidente Andrés Manuel López Obrador, quien concluirá su mandato en octubre, ha reafirmado su compromiso de continuar brindando apoyo durante el resto de su administración.

“Se mantiene una estrecha colaboración con el gobierno federal”, afirmó el director de Pemex, Octavio Romero, durante una conferencia con analistas. “Incluso muchos de los temas relevantes para Pemex son abordados en mesas de trabajo con la participación del presidente”, agregó.

Durante el año 2023, los apoyos del Gobierno a Pemex totalizaron 127,700 millones de pesos

En su informe financiero, la petrolera indicó que los apoyos del Gobierno ascendieron a 127,700 millones de pesos en 2023. Estos fondos fueron dirigidos al pago de amortizaciones de deuda y al fortalecimiento de su posición financiera.

Pemex está enfrentando un serio desafío con respecto a su deuda con proveedores, la cual aumentó un 27.5% el año pasado, alcanzando los 359,760 millones de pesos, el nivel más alto registrado hasta la fecha.

Según informó la empresa, en 2023 realizó pagos a sus proveedores por un total de 413,937 millones de pesos. Durante una conferencia con analistas, los directivos adelantaron que la empresa continuará realizando pagos este año, aunque no proporcionaron detalles específicos sobre los montos ni los cronogramas.

Fuentes cercanas indican que Pemex reanudó los pagos a sus proveedores hacia finales de 2023, aunque ha priorizado a las grandes empresas de servicios para evitar afectaciones en sus propias operaciones de exploración y extracción. Esto ha generado preocupaciones entre los operadores privados que venden su producción de crudo y gas a la empresa estatal.

Se esperaba que en su reporte financiero, Pemex proporcionara detalles sobre un plan de pagos a proveedores o si planeaba utilizar parte de un reciente crédito fiscal para solventarlos parcialmente.

El crédito fiscal anunciado es equivalente al 100% del monto del derecho por la utilidad compartida (DUC) correspondiente a octubre, noviembre y diciembre de 2023, así como a enero de 2024. Pemex destacó en su informe que el monto de este estímulo es de 91,500 millones de pesos, considerando únicamente los tres últimos meses del año pasado.

Reservas estables

Pemex informó que su producción de crudo y condensados, en conjunto con sus socios, aumentó un 3.0% en el cuarto trimestre en comparación con el mismo período de 2022, llegando a 1.856 millones de barriles por día (bpd). Este incremento se atribuyó a la incorporación de pozos de campos nuevos, que contribuyeron con aproximadamente 566,300 bpd, según el informe.

Por otro lado, la producción de gas, un área de preocupación para Pemex, disminuyó un 0.8% en el mismo período, alcanzando los 3,954 millones de pies cúbicos al día (MMpcd), incluyendo la producción conjunta con sus socios.

A pesar de los esfuerzos, la empresa estatal no ha logrado revertir la tendencia de declive en la producción de crudo en los últimos años, que se situó en alrededor de 1.6 millones de bpd en enero. Ahora, Pemex tiene como objetivo bombear 1.88 millones de bpd de hidrocarburos líquidos en 2024.

Además, Pemex estima mantener estables las reservas probadas (1P) este año en alrededor de 7.4 miles de millones de barriles de petróleo crudo equivalente.

La empresa ha estado llevando a cabo un plan de modernización de sus antiguas refinerías locales, que tienen una capacidad de 1.6 millones de barriles por día, con el objetivo de aumentar la producción de productos petrolíferos y llevar al país hacia la “autosuficiencia energética”.

En línea con este propósito, Pemex adquirió la refinería de Deer Park en Texas y construyó la refinería Olmeca, cuyo inicio de operaciones se ha retrasado varias veces. Funcionarios de la empresa mencionaron en la conferencia que la planta está programada para iniciar producción en las próximas semanas.

A pesar de estos esfuerzos, el procesamiento de crudo en las plantas de Pemex experimentó una disminución del 3% en 2023, llegando a 792,000 barriles por día (bpd). Además, la producción de gasolinas descendió un 6.6% a 244,000 bpd y la de diésel cayó un 8% a 135,000 bpd.

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