El 11 de marzo de 2020 marcó el inicio de una nueva era con la declaración de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el Covid-19 como pandemia global. Este evento sumió al mundo en un estado de miedo e incertidumbre, sin anticipar la magnitud de los desafíos que enfrentaríamos.
Cuatro años después, reflexionamos sobre si hemos aprendido lo suficiente y si estamos preparados para afrontar desafíos similares. El 27 de febrero de 2020, México registró su primer caso de Sars-Cov2, desatando temores en la población.
A medida que avanzaba el tiempo, el Gobierno federal declaró la emergencia sanitaria en México el 27 de marzo de 2020, con la esperanza inicial de que durara solo unas semanas. Sin embargo, las cifras de casos confirmados y fallecidos aumentaron rápidamente, con 19,224 casos confirmados y 1,859 fallecidos en tan solo 64 días.
El país se vio afectado por calles vacías, desempleo, problemas económicos y hospitales saturados, convirtiéndose en el cuarto país con más defunciones por Covid-19, después de Estados Unidos.
La vacunación contra el Sars-Covd2 comenzó en diciembre de 2020, y para junio de 2022, se habían administrado 209 millones de dosis a 88 millones de personas en México.
En mayo de 2023, se levantó la emergencia sanitaria en México, y en diciembre del mismo año, el país se convirtió en el primero en América Latina en comercializar las vacunas de Pfizer y Moderna contra esta enfermedad.
En lo que va del 2024, se han reportado 42,143 casos sospechosos de Covid-19 en México, con 3,570 confirmados y 90 defunciones registradas.Algunas de las medidas sanitarias implementadas fueron:
– Cierre de escuelas y lugares de trabajo,
- Cancelación de eventos públicos
- Restricciones de reuniones públicas
- Cierres de transporte público
- Llamado a quedarse en casa
- Restricciones a la movilidad y controles de viajes internacionales
Lavado de manos, uso de cubrebocas y aplicarse gel antibacterial.