La institución bancaria aseguró que el sector agrícola nacional contribuye con más del 3% al Producto Interno Bruto de México.
El banco español Santander señaló que no solo el sector secundario y terciario se verían beneficiados por la relocalización de industrias en Norteamérica, proceso conocido como nearshoring, sino que también las actividades primarias gozarían de un impulso que generaría mejores condiciones para el campo mexicano.
Rodolfo Hernández Sada, director Ejecutivo de Negocio Internacional y Agronegocios de Santander México, expresó en una conferencia de prensa que aunque no tienen una proyección específica del posible crecimiento del sector agrícola, sí estiman condiciones favorables para la agricultura nacional.
“Si la inversión en el sector agrícola aumenta, veremos un incremento en las exportaciones de productos hacia Estados Unidos, lo que resultará en una mayor contribución al Producto Interno Bruto (PIB)”, afirmó el directivo. Además, destacó que uno de los principales beneficios de este crecimiento sectorial sería retener en México a los agricultores que migran hacia Estados Unidos, lo que impulsaría el desarrollo del campo.
Según el especialista, las remuneraciones para los trabajadores del campo podrían ser equivalentes a las que reciben en Estados Unidos. “Existen regiones en México que ya no disponen de suficiente mano de obra para sostener las actividades agrícolas. En algunos casos, los grandes productores agrícolas tienen que recurrir a trabajadores de otras áreas. La esperanza es retener a este personal como un activo valioso, ofreciéndoles condiciones laborales similares a las que encontrarían en Estados Unidos. Los migrantes van allí por razones económicas, no porque prefieran trabajar allí”, afirmó Hernández Sada.
El especialista considera que el nearshoring puede generar un “beneficio triple”: retener la mano de obra, aumentar los salarios, beneficiar a las comunidades locales y convertir al sector agrícola en el principal generador de divisas, en lugar de depender de las remesas provenientes de Estados Unidos.
“Es positivo tener las remesas, pero es aún mejor tener el activo”, aseguró el directivo.
Hernández también señaló que existen importantes desafíos, como el cambio climático, la sequía y la seguridad.
El especialista enfatizó en la necesidad de una colaboración estrecha entre el sector privado y el gobierno para asegurar el aprovechamiento de la relocalización de industrias en México.
Según el Nearshoring Data Monitor de Santander, mientras Estados Unidos está aumentando sus importaciones de productos agropecuarios, México ya es el tercer proveedor de estos productos hacia el mercado estadounidense, con un 31% del total, lo que equivale a 44,200 millones de dólares al año. Esto genera un flujo de divisas que solo es superado por las remesas.
El banco español señaló que en México, el sector agrícola representa el 3.4% del Producto Interno Bruto (PIB) y emplea al 11.8% de la población económicamente activa.
Además, agregó que el año pasado México se convirtió en el principal socio comercial de Estados Unidos, superando a China y Canadá.
“Si bien nuestro país cuenta con una sólida base manufacturera de exportación, en la relación comercial con Estados Unidos destacan por su alta participación de mercado las exportaciones de productos como camiones, autobuses y vehículos, televisores y equipo de video, y buques comerciales”.
Durante el primer trimestre de 2024, las exportaciones de México hacia Estados Unidos aumentaron un 4.4% en comparación con el mismo período del año anterior, mientras que las importaciones totales de Estados Unidos solo crecieron un 1.0%.
“Estados Unidos es el principal productor agrícola del mundo, pero sus importaciones ya han superado a sus exportaciones. La oportunidad surge por la fortaleza de México en el comercio agrícola con nuestro vecino del norte, así como por la disponibilidad de tierras y los costos competitivos de mano de obra y transporte, que hacen atractiva la inversión de empresas multinacionales en nuestro país, ya sea de manera directa o a través de asociaciones con productores mexicanos establecidos, para exportar su producción a la Unión Americana”, señaló Rodolfo Hernández Sada.
En este contexto, Santander México destinará 3 mil millones de pesos durante el resto del año para apoyar al segmento de pymes, tanto en actividades agrícolas como en exportaciones. Esto representa un impulso significativo, considerando que Santander es el segundo banco en volumen de cartera agrícola, con cerca de 53 mil millones de pesos.