Ciudad de México. En un ambiente de celebración, la presidenta electa Claudia Sheinbaum y el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguraron el Museo Vivo del Muralismo en el emblemático edificio de la Secretaría de Educación Pública. En su discurso, Sheinbaum reflexionó sobre cómo el cambio de gobierno solía ser percibido como una “ruptura”. “Quién sabe por qué”, comentó con una sonrisa.
Durante la ceremonia, ambos líderes intercambiaron elogios y reafirmaron su compromiso con una transición pacífica y sin sobresaltos. Rodeada de los icónicos murales de Diego Rivera, Sheinbaum destacó la conexión entre la historia plasmada en las paredes y el papel del pueblo como “artífice” de su presente y futuro.
La presidenta electa subrayó los logros de la Cuarta Transformación (4T) y cómo ha “devuelto la dignidad al pueblo de México”. En un momento crucial, hizo referencia a la exclusión de Felipe VI, rey de España, de la lista de invitados a su toma de posesión, enfatizando la falta de una respuesta oficial al presidente López Obrador. “Esto no solo agravia al presidente, sino al pueblo de México”, afirmó.
Afirmando su orgullo por la historia nacional, Sheinbaum contrastó su postura con la de los neoliberales que se avergonzaban del pasado. “Nosotros, al contrario, celebramos a nuestros pueblos originarios y hemos aprobado reformas que garantizan sus derechos plenos”, señaló, cerrando su intervención entre aplausos y vítores a los pueblos indígenas y a la 4T.
El nuevo museo, que ocupará los primeros dos niveles de la histórica sede de la SEP, albergará diversas salas en lo que antes fueron oficinas, con el objetivo de educar y promover el legado muralista entre las futuras generaciones.