En una operación conjunta entre fuerzas federales, fue detenido Ricardo “N”, señalado como líder de un grupo delictivo que ha generado violencia en los estados de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila. La captura fue confirmada por Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México, quien destacó la coordinación entre diversas instituciones para lograr este importante arresto.
La operación, encabezada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en colaboración con el Gabinete de Seguridad, la Secretaría de Marina (Semar), la Fiscalía General de la República (FGR) y la Guardia Nacional, se llevó a cabo tras varios meses de seguimiento e investigaciones. García Harfuch dio a conocer la noticia a través de su cuenta en X, donde subrayó el éxito de la intervención y el trabajo coordinado de las fuerzas de seguridad.
Ricardo “N” ha sido vinculado con numerosos crímenes, incluyendo extorsiones y ataques directos a elementos de seguridad. Su historial criminal incluye la agresión a policías de Fuerza Civil en Nuevo León, así como su participación en la emboscada de militares en Nuevo Laredo en agosto de 2024, donde resultaron heridos cinco elementos y dos más perdieron la vida. Estos ataques reforzaron su perfil como uno de los líderes más peligrosos en la región noreste del país.
Además, el detenido cuenta con diversas órdenes de aprehensión por homicidio, secuestro y otros delitos de alto impacto, lo que lo convertía en uno de los objetivos prioritarios de las autoridades federales. Las células delictivas que operaban bajo su mando también están siendo investigadas, y se prevé que las autoridades intensifiquen los esfuerzos para desmantelar completamente su estructura criminal.
El secretario Omar García Harfuch no solo resaltó la importancia de esta captura, sino también la coordinación entre las diversas fuerzas de seguridad para lograr un resultado tan contundente. En particular, destacó la participación de las Fuerzas Especiales de la Sedena, quienes jugaron un rol clave en la planificación y ejecución de la operación.
Con la detención de Ricardo “N”, se espera que disminuya la violencia en los estados afectados, aunque las autoridades mantienen la vigilancia en las zonas donde su grupo delictivo tenía presencia, para evitar posibles represalias o intentos de reestructuración. Las investigaciones continúan y se prevé que en los próximos días se den a conocer más detalles sobre el caso.