Las autoridades instan a preservar el agua debido a la amenaza de escasez.
La posibilidad de escasez y la presencia nuevamente de agua salina en los hogares han regresado a la zona, dado el constante descenso en el nivel de la laguna del Chairel, la principal fuente para la región. Según la última medición en la escala hidrométrica
del Canal de Tancol, el sistema lagunario ha alcanzado los 38 centímetros y sigue disminuyendo, sin que haya pronóstico de lluvias.
El director de la Casa de la Naturaleza, José Luis León Hurtado, advierte sobre la persistente amenaza de intrusión de agua salina. Destaca que la próxima temporada de estiaje podría ser una de las más intensas debido a la ausencia de precipitaciones significativas en los meses venideros.
León señala que la escala hidrométrica del sistema lagunario se sitúa en 38 centímetros, mostrando un descenso continuo. Advierte que existe el riesgo de que en los meses de marzo y abril se repita la invasión de agua salada en el sistema lagunario, similar a lo ocurrido en 2021.
Advirtió que, en ausencia de lluvias, se espera una nueva disminución de al menos 20 centímetros en las próximas semanas en el Sistema Lagunario del Río Tamesí-Chairel. Por ello, insta a implementar medidas de cuidado del agua desde ahora, haciendo hincapié en la responsabilidad en el uso del vital líquido en industrias, comercios y la población en general.
Es esencial crear una iniciativa conjunta para la conservación del agua. A finales de enero, el nivel estaba en 42 centímetros, pero al inicio de febrero ya disminuyó 4 centímetros y sigue descendiendo. Durante noviembre, llegó a estar por debajo de 10 centímetros, generando dificultades en el suministro.
El entrevistado subrayó la necesidad de tomar medidas de emergencia y formar un frente unificado a través del Consejo de Cuenca y otros organismos vinculados al agua. Propuso la colaboración entre industriales y agricultores para hacer frente a la situación, advirtiendo que, en caso de no llover, la situación podría volverse más crítica.
La disminución constante en la laguna del Chairel aumenta el riesgo de escasez y, como ocurrió en 2021, de experimentar nuevamente agua salina en los hogares. Se hace un llamado a cuidar el agua.