En medio de críticas de competidores que consideran que los esfuerzos de Apple por cumplir con las regulaciones son deficientes, la empresa ha implementado cambios significativos.
A partir de esta primavera boreal, los desarrolladores de software que dependen de la App Store de Apple tendrán la opción de distribuir sus aplicaciones directamente a los usuarios de la Unión Europea desde sus propios sitios web. Este anuncio se produce como respuesta a las nuevas regulaciones comunitarias que requieren que la empresa abra su ecosistema cerrado.
La recién implementada Ley de Mercados Digitales (DMA) de la Unión Europea, que comenzó a regir la semana pasada, impone a Apple la obligación de proporcionar tiendas de aplicaciones alternativas en los iPhones. Además, exige que la empresa permita a los desarrolladores elegir no utilizar su sistema de pago “in-app”, que impone tasas que pueden alcanzar hasta el 30%.
“Estamos brindando mayor flexibilidad a los desarrolladores que distribuyen aplicaciones en la Unión Europea, lo cual incluye la implementación de una nueva opción para distribuir aplicaciones directamente desde el sitio web de un desarrollador”, declaró Apple en su blog.
Apple ha anunciado que permitirá a los desarrolladores distribuir aplicaciones directamente desde sus propios sitios web.
“Apple proporcionará a los desarrolladores autorizados acceso a las API (interfaces de programación de aplicaciones) que facilitan la distribución de sus aplicaciones desde la web, la integración con las funciones del sistema, la realización de copias de seguridad y la restauración de las aplicaciones de los usuarios, etc.”, añadió.
Además, se permitirá a los desarrolladores que creen mercados de aplicaciones alternativos ofrecer un catálogo compuesto exclusivamente por sus propias aplicaciones, con efecto inmediato.
Los desarrolladores tendrán la capacidad de personalizar las promociones dentro de la aplicación, así como los descuentos y otras ofertas al dirigir a los usuarios a completar una transacción en sus propios sitios web, en lugar de seguir la plantilla proporcionada por Apple.
Estos cambios en las políticas de Apple se dan en medio de las persistentes críticas de sus competidores, quienes consideran que los esfuerzos de la empresa por cumplir con las regulaciones son insuficientes. Las empresas que violen la DMA podrían enfrentar multas de hasta el 10% de sus ingresos globales.