La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo afirmó que México es un país donde la informalidad laboral es tolerada.
Octavio de la Torre, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Sevitur), afirmó que solo el 45 por ciento de los trabajadores se benefician de las reformas laborales implementadas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Esto se debe a que el resto son empleados informales que carecen de cualquier tipo de prestación social.
“Se proponen reformas por los diputados y senadores y se aprueban incrementos salariales anuales por el sector patronal, obrero y gubernamental. Dichos beneficios y modificaciones son únicamente para el 45 por ciento de la economía, lo que representa menos de la mitad de la población económicamente activa”, afirmó.
El directivo consideró que actualmente coexisten dos realidades en México, la fuerza laboral y los negocios que cumplen con las reformas, que representan únicamente el 45.2 por ciento del total, mientras que los que operan en la informalidad y fuera de la ley, que suman el 54.8 por ciento.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al cuatro trimestre de 2023 aproximadamente el 54.8 por ciento de la población ocupada opera en la informalidad, añadió.
“Es decir, más de 32.5 millones de personas son invisibles para las reformas y leyes laborales que impulsan el gobierno de México y los legisladores”, señaló.
La informalidad es un problema estructural en México que representa más del 50 por ciento de la economía nacional, recordó el representante empresarial.
De la Torre agregó que las reformas impulsadas “como deporte nacional” no atienden la realidad y generan pobreza en millones de trabajadores y sus familias, ya que al ser invisibles quedan al margen de los beneficios de un sistema de salud y privados de una pensión para el retiro, de acceso a la vivienda o de cualquier otra prestación.
“Hoy, los estados con mayor informalidad son Oaxaca con 81.1 por ciento, Chiapas con 73.2 por ciento, Hidalgo con 71.8 por ciento, Tlaxcala con 71.4 por ciento, Puebla con 69.9 por ciento, Veracruz con 68.1 por ciento, Michoacán con 66.8 por ciento y Morelos con 63.3 por ciento”, indicó.
El presidente de Concana Servitur comentó que los trabajadores en la economía informal, que representan la mayoría en México, no están sujetos a la legislación laboral, y los empleadores no cumplen con el pago de impuestos.
“Las familias carecen de cobertura, protección social y de prestaciones relacionadas con el empleo, logros, todos ellos, que han sido impulsados y respaldados por el sector formal empresarial, el gobierno y los propios trabajadores”, señaló.
De acuerdo con el presidente de Concanaco Servytur, 10 millones de trabajadores del sector informal de la economía perciben ingresos mensuales inferiores a un salario mínimo, mientras que el resto recibe ingresos que van desde un salario mínimo hasta cinco salarios mínimos.
“Los dueños de negocios familiares y empresarios que generan empleo formal representan el 45.2 por ciento de la formalidad laboral, lo que incrementa la presión tributaria y normativa”, puntualizó.
Los negocios establecidos que cumplen con las regulaciones se enfrentan a una sobrerregulación, estando sujetos a constantes reformas legales, certificaciones, revisiones, auditorías y visitas de inspección.
“La carga normativa para quienes realizan trámites y servicios federales representa un costo económico equivalente al 2.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, cifra similar, por ejemplo, a la aportación de todo el estado de Michoacán en un año”, comentó.
El directivo señaló que aquellos que operan en la economía informal, que son mayoría, evaden las regulaciones mediante el pago de una anualidad al municipio o simplemente procediendo al margen de la ley, lo que socava los esfuerzos por promover la formalización y el cumplimiento de las normativas establecidas.
“De nada sirven que se presenten nuevas reformas de ley para mejorar el bienestar de los empleados si la mayoría de los negocios opera en la informalidad, sintiéndose exentos de incrementar salarios, días de vacaciones o cualquier otro beneficio”, concluyó Octavio de la Torre.
