López Obrador resaltó la experiencia de Sheinbaum en el Gobierno de la Ciudad de México, especialmente en la gestión de las finanzas públicas. Además, expresó su descontento por lo que considera una falta de aprecio en el país hacia los logros alcanzados, un problema que, según él, proviene de una ‘manía’ heredada de los neoliberales.
Este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador colocó a su sucesora, Claudia Sheinbaum, entre “los cinco mejores” líderes a nivel mundial.
Durante su conferencia de prensa diaria, López Obrador reafirmó esta posición, subrayando la experiencia de Sheinbaum en la gestión de las finanzas públicas durante su tiempo como jefa de Gobierno de la Ciudad de México (2018-2023). También expresó su preocupación por lo que considera una falta de reconocimiento en el país hacia los logros, algo que atribuye a una “manía” heredada de los neoliberales.
López Obrador expresó: “No exagero, pero estamos ante un hecho que debe llenarnos de orgullo: vamos a tener una presidenta con una capacidad de Gobierno excepcional”. En consecuencia, la incluyó en el ‘top 5’ de presidentes y presidentas a nivel mundial.
López Obrador afirmó: “Estamos hablando de las cinco mejores autoridades del mundo, ya sean jefes de Estado, presidentes o primeros ministros… La presidenta electa está entre los cinco mejores”.
En las elecciones del 2 de junio, la presidenta electa obtuvo 35.92 millones de votos, equivalentes al 59.75% del total, la mayor proporción desde el 70.96% que alcanzó Miguel de la Madrid en 1982, cuando el PRI controlaba el proceso electoral.
Sheinbaum superó a su rival más cercano, la opositora Xóchitl Gálvez de la coalición Fuerza y Corazón por México, por más de 30 puntos y casi el doble de votos. Gálvez logró el 27.45% de los votos, es decir, 16.41 millones.
Al ser consultado sobre la gestión económica del próximo gobierno de Sheinbaum, el presidente saliente, que entregará el cargo el 1 de octubre, manifestó que “no hay ningún temor a nada” y aseguró que “las finanzas públicas” de México están “muy fuertes”.
Explicó que, a partir de octubre, será la presidenta constitucional quien tomará las decisiones sobre el presupuesto del próximo año. No obstante, detalló que se está trabajando “de manera coordinada” entre su administración y la que asumirá en octubre, elogiando el proceso de transición en curso.
A mediados de junio, López Obrador anticipó que, a pesar del cambio de gobierno, la ‘Cuarta Transformación’ continuará bajo la presidencia de Sheinbaum, y aseguró que no habrá un “viraje” en el estilo de gobernar.
Se preguntó: “¿Cuándo se había visto que saliéramos juntos, el presidente constitucional y la presidenta electa?”
