Moody’s prevé que Estados Unidos endurecerá sus políticas comerciales y migratorias, sin importar si la próxima presidenta es la demócrata Kamala Harris o el republicano Donald Trump. En su análisis, la firma señala que la administración que asuma mantendrá un enfoque hacia políticas más estrictas, dependiendo del equilibrio de poder en el Congreso.
En el ámbito comercial, Moody’s anticipa que EE. UU. adoptará una postura proteccionista para contrarrestar el creciente dominio de China en sectores estratégicos y en la cadena de suministro global. Esto incluye la preocupación por el aumento del comercio entre China y Latinoamérica, lo que podría generar más tensiones.
Con respecto a Europa, Moody’s identifica una oportunidad para que EE. UU. mejore la previsibilidad de sus políticas, aunque advierte que mayores tarifas estadounidenses sobre productos chinos podrían tener un efecto negativo en el bloque europeo. La agencia también sugiere que fortalecer la transición energética en las Américas podría ayudar a contrarrestar la influencia china.
En cuanto a la política migratoria, se espera que el próximo gobierno continúe luchando contra los cruces ilegales y reduzca las concesiones de asilo. Aunque Harris y Trump tienen enfoques diferentes, ambos podrían impactar negativamente los flujos comerciales y de inversión.
Finalmente, Moody’s menciona que ambos candidatos incrementarían los esfuerzos para reducir la influencia de los cárteles de drogas, lo que implicaría una mayor colaboración con Latinoamérica en términos de inteligencia. Además, el informe evalúa el apoyo a Ucrania, sugiriendo que la victoria de Harris mantendría la relación con la OTAN en niveles actuales, con riesgos de seguridad altos pero estables.