Luego de llevarse acabo la 4ta. reunión del Comité de Seguimiento y Evaluación del Semáforo del Agua, y de haberse notificado que la zona sur de Tamaulipas se encontraba ya pintada de amarillo, la ciudadanía ha compartido sus impresiones en cuanto a esta situación.
Gran parte de los sureños viven desinformados en cuanto a este suceso, sin embargo, al darse cuenta de la posible escasez de agua que se avecina para la zona conurbada, han comenzado a valorar la magnitud del monitor de sequía.
Algunos ciudadanos expresan seriedad, externando el ser más consciente con el uso del vital líquido, que lamentablemente ha sido infravalorado por mucho tiempo.
Al ser enterados de que Tampico esté en color amarillo derivado a qué el sistema lagunario descendió 17 centímetros durante el último mes, se ha generado un “escarmiento” para quienes argumentaban que nunca se acabaría el agua.
Lastimosamente, otra gran parte de la ciudadanía argumenta que este tipo de dinámicas “son puros cuentos” llenos de falacias y que el objetivo es solo causar alarma entre la sociedad. Sin duda alguna, con esto solo queda en evidencia que la cultura para el cuidado del agua en el estado de Tamaulipas, es una tarea urgente por resolver.
Las recomendaciones por parte del comité de seguimiento y evaluación para el amarillo, es estrictamente dejar de utilizar agua de manera usual, realizando solo lavados de ropa máximo dos veces a la semana, mientras que actividades como regado, lavada de coches, construcción, entre otras, solo se apliquen una vez a la semana; de la misma forma queda prohibido utilizar agua potable para cualquier actividad.