El presidente del Consejo Nacional de la Tortilla afirmó que delitos como el cobro de piso, la extorsión y la inseguridad han impactado negativamente en el costo de producción de la tortilla.
Homero López García, presidente del Consejo Nacional de la Tortilla (CNT), ha señalado que el precio del kilogramo de tortilla ha aumentado en un 60.9%, atribuyendo este incremento al encarecimiento de los insumos, la inflación y la inseguridad durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Comenzamos con un precio de 14 pesos por kilogramo de tortillas (en diciembre de 2018), y durante este período presidencial ha habido un incremento muy significativo”, declaró el empresario. Añadió que su sector ha sufrido considerablemente debido a los impactos de la pandemia por Covid-19, la guerra entre Rusia y Ucrania y la violencia en diversas regiones de México.
“Al perro más flaco siempre le saltan las pulgas. Siempre vemos que los políticos se apropian de los problemas relacionados con la tortilla, prometiendo apoyo, pero nunca se toman medidas concretas para respaldar a una industria como la nuestra”, comentó.
Al concluir el año 2018, al inicio del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, el precio promedio del kilogramo de tortilla era de 14.33 pesos a nivel nacional. Sin embargo, para mayo de 2024, este precio ha aumentado significativamente, alcanzando un promedio de 23.05 pesos por kilogramo. En estados como Baja California, Coahuila y Sonora, el costo se sitúa entre 30 y 31 pesos, según explicó el directivo.
Ante esta situación, el líder de la industria tortillera hizo un llamado de atención a las candidatas presidenciales Claudia Sheinbaum Pardo y Xóchitl Gálvez Ruiz, instándolas a abordar los problemas cruciales que afectan tanto a los productores como a los consumidores de tortilla en México. Según López García, se necesitan acciones concretas para asegurar la estabilidad y calidad de este producto fundamental en la dieta nacional, que se ha visto afectado por el encarecimiento de insumos como el papel grado alimenticio, el gas, lubricantes y refacciones, así como por el aumento en los costos operativos como los fletes de maíz, los salarios y los gastos de salud. Además, se han registrado pérdidas debido a cortes de electricidad en más de 4,800 tortillerías en 15 estados del país.
En respuesta a los recientes apagones, el directivo señaló que las tortillerías han invertido en la instalación de plantas de energía en diversas regiones para garantizar el suministro eléctrico ante posibles fallas en el sistema nacional.
Homero López García también destacó el impacto de la industria tortillera en la inflación y en los programas económicos federales. Según el presidente del Consejo Nacional de la Tortilla, la exclusión de la tortilla de la canasta básica en el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic) ha influido en la evolución de su precio.
El directivo resaltó que en el Paquete Contra la Inflación y la Carestía se incluyeron únicamente empresas harineras, a pesar de que el 95% de la producción de tortillas proviene de tortillerías, y su proceso de fabricación está dividido en un 52% de masa nixtamalizada y un 48% de harina de maíz.
En 2023, la Norma Oficial Mexicana 187, impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, prohibió la elaboración y venta de tortillas elaboradas con maíz transgénico en México. Sin embargo, esta medida “responsabilizaba a las tortillerías de su cumplimiento, cuando son las grandes comercializadoras y harineras que controlan el mercado quienes deberían informar sobre el origen de la materia prima”.
El directivo también señaló que la inseguridad, debido a la extorsión y el cobro de piso que afecta al 30% de las tortillerías en el país, es otro factor que influye en el precio del kilogramo de tortilla para el consumidor, así como en la inversión en sistemas de seguridad privados.