Ante la posibilidad de que las operaciones cotidianas se vean afectadas en los próximos dos o tres años, el grupo ha decidido implementar medidas que priorizan las garantías respaldadas por activos.
El grupo financiero Banorte, dueño de uno de los principales bancos y fondos de pensiones en el país, está tomando medidas para reducir el impacto de una extensa reforma judicial aprobada en septiembre, según informaron sus ejecutivos el miércoles.
¿Por qué es importante?
Banorte anticipa que la reforma tendrá un impacto significativo en sus operaciones en los próximos dos o tres años. Para prepararse, ya está implementando medidas como priorizar las garantías respaldadas por activos, utilizar garantías de terceros, ajustar algunos convenios financieros y aumentar el uso de vehículos de propósito especial, según indican sus ejecutivos.
Contexto
La reforma fue impulsada por el expresidente Andrés Manuel López Obrador al final de su administración. Esta iniciativa establece que todos los jueces deben ser elegidos por votación popular, lo que ha generado preocupación entre los inversores y provocado una caída del peso frente al dólar.